El otoño ha llegado definitivamente para quedarse y con el llegan también el frio, la lluvia y el viento. Por este motivo es importante que revisemos nuestro coche y lo pongamos a punto para la nueva temporada.
Así uno de los primeros aspectos a revisar son los neumáticos. Obviamente, siempre tenemos que llevar los neumáticos en perfecto estado pero ahora se hace especialmente importante. Con la llegada de las lluvias, es preciso garantizar un buen agarre y un buen nivel de evacuación de agua. Si tus neumáticos están cristalizados o sin dibujo es el momento de cambiarlos. Por supuesto, también controlaremos que la presión sea la recomendada por el fabricante.
Otro aspecto a tener en cuenta es la iluminación. Durante los meses de verano la mayoría de los desplazamientos se han realizado con luz natural. Ahora, las horas de luz disminuyen y es preciso asegurarnos de que no tenemos ninguna lámpara fundida para poder ver y ser vistos.